Haruki Murakami
Sueño - Haruki Murakami
Libros del Zorro Rojo

Páginas: 84
Formato: 24 x 17 x 2
Peso: 0.7 kgs.
ISBN: 9789871948260

Texto inédito del popular autor japonés Haruki Murakami. ''Nemuri'', un relato largo (publicado originalmente en 1990) traducido como ''Sueño'' y que cuenta, además, con el atractivo de las ilustraciones de la artista alemana Kat Menschik. ''Hace ya diecisiete días que no puedo dormir. No hablo de insomnio. El insomnio lo conozco un poco. Una vez, cuando estudiaba en la universidad, sufrí algo parecido. Hago notar que era ''algo parecido'' porque no tengo la certeza de que los síntomas coincidan con lo que la gente suele entender por insomnio. Supongo que, si hubiera ido al hospital, al menos habría averiguado si se trataba o no de insomnio. Pero no fui. Porque me daba la impresión de que no serviría de nada. No es que tuviera algún fundamento especial para creerlo. Me lo decía simplemente la intuición. Que sería inútil. De modo que no visité a ningún médico y se lo oculté todo el tiempo a mi familia y a mis amigos. Porque sabía que, si se lo decía a alguien, me aconsejaría, sin duda, acudir al hospital''.'

Sueño - Haruki Murakami

$24.450
Sin stock
Sueño - Haruki Murakami $24.450
Compra protegida
Tus datos cuidados durante toda la compra.
Cambios y devoluciones
Si no te gusta, podés cambiarlo por otro o devolverlo.

Haruki Murakami
Sueño - Haruki Murakami
Libros del Zorro Rojo

Páginas: 84
Formato: 24 x 17 x 2
Peso: 0.7 kgs.
ISBN: 9789871948260

Texto inédito del popular autor japonés Haruki Murakami. ''Nemuri'', un relato largo (publicado originalmente en 1990) traducido como ''Sueño'' y que cuenta, además, con el atractivo de las ilustraciones de la artista alemana Kat Menschik. ''Hace ya diecisiete días que no puedo dormir. No hablo de insomnio. El insomnio lo conozco un poco. Una vez, cuando estudiaba en la universidad, sufrí algo parecido. Hago notar que era ''algo parecido'' porque no tengo la certeza de que los síntomas coincidan con lo que la gente suele entender por insomnio. Supongo que, si hubiera ido al hospital, al menos habría averiguado si se trataba o no de insomnio. Pero no fui. Porque me daba la impresión de que no serviría de nada. No es que tuviera algún fundamento especial para creerlo. Me lo decía simplemente la intuición. Que sería inútil. De modo que no visité a ningún médico y se lo oculté todo el tiempo a mi familia y a mis amigos. Porque sabía que, si se lo decía a alguien, me aconsejaría, sin duda, acudir al hospital''.'